Amigo de Dulce asegura que enfermó de gravedad por la relación que tenía con su hija

La repentina partida de la icónica cantante mexicana Dulce ha conmocionado al mundo artístico. Mientras sus fans y colegas aún lloran su ausencia, una serie de revelaciones sobre su vida privada han puesto en el centro de la atención la compleja relación que mantenía con su hija.

• Recomendado

Un vínculo familiar fracturado

Jorge Flores, íntimo amigo de Dulce, sorprendió a todos al revelar en el programa "La Saga" de Adela Micha los detalles de una profunda crisis familiar que habría desencadenado un deterioro en la salud de la cantante. Según Flores, la prohibición de ver a su nieto habría sumido a Dulce en una profunda tristeza, desencadenando una enfermedad que la llevó a hospitalizarse.

“Tenía una relación muy tensa con la hija, incluso le prohibió ver a su nieto que era su adoración. Ella cuando fue a verla no le dejó ver al nieto”. aseguró Flores.

"Ella lloró mucho conmigo esa vez", confesó Flores, quien aseguró que la cantante se encontraba muy afectada por esta situación. "Desde ahí se enfermó ella, gravemente, fue desde ahí". Estas declaraciones han generado un gran revuelo en las redes sociales, donde los fans de Dulce expresan su consternación y piden respeto por la memoria de la artista.

Versiones encontradas

Sin embargo, no todos comparten la versión de Jorge Flores. Roberto Hernández, otro amigo cercano de Dulce, ha salido en defensa de la hija de la cantante, Romina. Según Hernández, Romina se mostró siempre muy preocupada por la salud de su madre y estuvo a su lado hasta el último momento.

"Yo lo único que vi es a una hija suplicándole a Dios la recuperación de su mamá", aseguró Hernández, quien desmintió categóricamente que Romina hubiera tenido una mala relación con su madre. Estas declaraciones contradictorias han generado una gran confusión entre los seguidores de Dulce, quienes intentan reconstruir las últimas semanas de vida de la cantante.

El legado de Dulce

Más allá de las polémicas familiares, la muerte de Dulce representa una gran pérdida para la música mexicana. Su voz inconfundible y su carisma la convirtieron en una de las artistas más queridas de su generación. Sus canciones marcaron a varias generaciones y su legado perdurará por siempre.